PROMOVIENDO EL DESARROLLO RURAL EN LA REGIÓN AMAZÓNICA DEL ECUADOR

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La pobreza es uno de los rasgos más persistentes de la sociedad, también en Ecuador, donde su incidencia es especialmente significativa en los habitantes rurales, que en numerosas ocasiones no cuentan con un ingreso suficiente para cubrir sus necesidades elementales. Además, la situación de estos colectivos rurales, esencialmente agrícolas, se ve agravada por la falta de una inversión productiva y de apoyo a la comercialización, así como de una grave falta de acceso a asesoría e investigación de nuevas prácticas que garanticen una mejor producción.

Por todos estos motivos y con el objetivo de reducir los niveles de pobreza y exclusión social de la población indígena y campesina de los cinco barrios de la Parroquia Rural San Isidro en el Cantón Morona en Ecuador, la Fundación PROCLADE gracias a la financiación española del Gobierno de la Rioja y de la contraparte local Fundación ATASIM, han desarrollado en esta zona un proyecto centrado en el desarrollo rural de las familias campesinas e indígenas Shuar a través de la mejora de la formación y bienestar de los productores locales y del impulso de una producción agrícola sostenible que permita proteger y conservar asimismo los recursos naturales de la zona.

 

Para ello, durante 12 meses el proyecto ha buscado mejorar las condiciones de soberanía alimentaria de esta región para lograr así el desarrollo rural de las familias productoras de esta comunidad de San Isidro, en concreto, de las familias campesinas indígenas Shuar y, en especial, de las mujeres de la zona.

Para alcanzar esos fines, este proyecto ha llevado a cabo, por un lado, un programa de capacitación técnica en el manejo de tecnologías productivas aplicando a buenas prácticas y protección ambiental, que ha contado con la participación activa de la comunidad beneficiaria, un total de 145 productores, y en el que la equidad de género ha sido también una prioridad dado que el 65% de los beneficiarios han sido mujeres.

Por otro lado, también se ha buscado aumentar y diversificar la productividad y producción agropecuaria y artesanal de todos productores, mediante talleres muy variados y enriquecedores que han ido desde el manejo, alimentación y sanidad de pollos de campo o la reproducción de cuyes, a la cría de peces en estanques de tierra, el manejo y conservación de la abeja Melipona amazónica o la elaboración de artesanías y procesos de emprendimientos productivos.

De este modo, y en definitiva, este proyecto, que ha beneficiado en su conjunto a un total de 785 personas, ha buscado promover un proceso de participación enfocado a la lucha contra la pobreza y la exclusión social, así como al desarrollo local, a la mejora de los espacios de participación de la población rural y, en definitiva, a un desarrollo verdaderamente sostenible.

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