Cada año, el 8 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Alfabetización para recordar que la capacidad de leer y escribir no es solo una habilidad fundamental, si no un derecho humano esencial. A nivel global, millones de personas aún carecen de acceso a la educación, como en Burkina Faso, un país en el corazón del África Subsahariana con altas tasas de analfabetismo y dónde la educación es una herramienta clave para combatir la pobreza, promover la igualdad de género y fomentar el desarrollo sostenible.