El pasado domingo, la solidaridad se puso la ropa de deporte y saltó a la pista a correr. Fue en la I Carrera Solidaria Claret-PROCLADE donde cientos de alumnos y alumnas, profesores y familiares pusieron su granito de arena para hacer de este acto un verdadero éxito. Un éxito que llegará hasta N’Sele (Kinshasa, República Democrática del Congo); todo lo recaudado ayudará equipar la maternidad y el laboratorio del dispensario del municipio.
A iniciativa de los profesores de Educación Física del centro, y con la ayuda de Fundación PROCLADE, durante toda la mañana del domingo las carreras en hasta cuatro categorías se fueron sucediendo. Al terminar, los alumnos se dirigieron a la zona de avituallamiento a recoger su zumo y su barrita energética, con la que reponer fuerzas para el resto de actividades que estaban preparadas. Porque el colegio se llenó no sólo de carreras sino también de talleres de chapas, trenzas, pulseras de hilo, malabares, pintacaras, castillo hinchable, magia… Además, en la biblioteca, dos voluntarias llevaron a cabo un cuentacuentos en el que los más pequeños disfrutaron de lo lindo.
Todo fue posible gracias a los voluntarios (profesores y alumnos) del colegio, de Fundación PROCLADE y de otras entidades. Cada uno de ellos trajo ilusión, entusiasmo y confianza en que con actividades como esta se dan pasos para construir un mundo más justo y solidario.