CREANDO SEGURIDAD ALIMENTARIA Y SANITARIA EN HAITÍ

  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura
  • Categoría de la entrada:Ayuda Humanitaria / Noticias

Desde Fundación PROCLADE seguimos interviniendo en las comunidades más vulnerables. En concreto, Haití es un país que sufre un constante contexto de crisis, dónde en los últimos años ha sido escenario de emergencias climáticas, sanitarias y políticas que han ido agravando enormemente la situación de vulnerabilidad extrema en la que ya se encontraba. En octubre de 2022, Haití declaró un estado de alerta debido al resurgimiento del cólera, tras más de tres años sin reportar un caso y que se ha cobrado la vida de al menos 452 personas, según indica el Ministerio de Salud Pública de Haití.

Una enfermedad bacteriana causada por alimentos o agua contaminados que provoca diarrea acuosa aguda y vómitos que pueden derivar en deshidratación. Los casos más leves se tratan con sales de rehidratación oral, aunque los graves requieren de líquidos intravenosos y antibióticos, pudiendo ser mortales. En un país en el que la asistencia sanitaria es intermitente en los cascos urbanos y prácticamente inexistentes en las zonas rurales, la detección precoz conseguir los medicamentos requeridos no siempre es fácil.

Por ello, desde PROCLADE se va a dar inicio a un proyecto en el barrio de Nazón en Puerto Príncipe (Haití), gracias al apoyo del Principado de Asturias y junto al trabajo de CMF Haití, para dar respuesta a la grave situación humanitaria que sufre el barrio y contribuir a disminuir la vulnerabilidad de la población beneficiaria. Esta intervención se realizará a través de la distribución de kits individuales y familiares de alimentos y productos de primera necesidad.

Además, se realizarán formaciones sobre nutrición general y nutrición específica para mujeres embarazadas, lactantes e infancia, economía doméstica y salud enfocada a la prevención de enfermedades de contracción hídrica. Unos conocimientos que servirán para evitar en un alto porcentaje la incidencia y los síntomas más graves y evitables de enfermedades de transmisión hídrica y en especial frente al brote de cólera que sufre el país y sobre todo el departamento oeste del mismo.

Con esta intervención se pretende no sólo ofrecer una ayuda puntual, sino un trabajo coordinado, completo y participativo que colabore en dar respuesta a las necesidades más básicas de la población. Una labor que no sería posible sin el trabajo que desarrollan los Misioneros Claretianos de la Delegación Independiente de Antillas y el apoyo del Principado de Asturias.

Estefanía Duarte, técnica de Comunicación y Comercio justo

Deja una respuesta