El reciente viaje de nuestra compañera a Camerún sigue resonando muy fuerte. Hoy nos trae su experiencia en el centro hospitalario San Martín de Porres, donde tuvo la oportunidad de conocer la buena evolución del programa y la cantidad de camerunenses a los que atienden y sensibilizan cada día.
En estos diez años el centro ha ampliado sus consultas, optimizando el espacio del que disponían, han fortalecido el programa de voluntariado, ampliado los laboratorios y creado un equipo de trabajo humano local capaz de gestionar el Centro Hospitalario, lo cual no es fácil pues cuenta con más de 150 trabajadores.
Pero no solo se han conformado con las consultas, el centro dispone de un equipo de concienciación que elabora materiales y videos para la formación de la población con el fin de poder prevenir enfermedades y concienciar sobre la importancia de la salud, la nutrición o el cuidado del bebe entre muchos otros temas.
Pero la vida en Camerún sigue y avanza rápido y hay que avanzar con ella, por ello en los últimos años el trabajo en salud se ha ampliado y ya disponen de la primera unidad del país de cuidados paliativos, tan necesarios para poder proporcionar cuidados dignos en un entorno en el que las viviendas son muy humildes y carecen de las condiciones para atender a los enfermos.
En la casa de cuidados paliativos los enfermos pueden disponer de los cuidados y comodidades necesarios para sobrellevar su enfermedad con dignidad, porque todo ser humano tiene derecho a ser cuidado y atendido dignamente y aquí en el centro Hospitalario San Martin de Porres se hace realidad.