Para ayudar a Nepal a seguir construyendo futuro, y con la experiencia de haber gestionado proyectos tras el tsunami de 2004, han decidido salir de la ciudad de Katmandú, donde llega la mayor parte de la ayuda, y trasladarse a zonas menos accesibles donde la ayuda llega con cuentagotas. Así, han diseñado un proyecto de emergencia para el que nos piden colaboración y con el que pretenden cubrir las necesidades básicas de 430 familias de cuatro comunidades a 50 kilómetros de la capital: Phostar Village (Distrito de Dhading), Ittakhel (Distito de Sankhu), Khawa (Distito de Panchkhaal) y Vurumuchuli (distrito de Lalithpur).
Con este proyecto, para el que solicitan 70.000 euros, pretenden cubrir necesidades inmediatas de unas 2.000 personas y entre las que se alimentación, potabilizadoras de agua, letrinas, medicamentos… También van a proporcionar lonas para tiendas de campaña ante la amenaza de lluvias y monzones así como baterías solares para recargar teléfonos móviles y otros aparatos electrónicos.
Pero los misioneros desplazados a la zona recuerdan que la ayuda no acaba aquí. A medio plazo necesitarán material para las escuelas que, aunque ya están reabriendo sus aulas, han perdido sus materiales: mochilas, reglas, bolígrafos, libros… Además, creen que será necesario derribar parte de las estructuras dañadas y que puedan ser peligrosas. Mientras, a largo plazo, explican, la ayuda irá dirigida a la rehabilitación de viviendas que se puedan convertir en el hogar permanente de los afectados por el seísmo.
Un largo camino por delante que se hará menos duro con la ayuda de todos. El cauce está abierto: PROCLADE canalizará a través de ellos las ayudas que recibamos, tanto de primera urgencia como para reconstrucción, en nuestra cuenta: ES77 0049-3283-56-2015006031.