ILUSIONES ENCADENADAS

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El diario El Comercio de Asturias se hace eco de esta cadena humana.

-¿Por qué se protesta aquí?

 No es una manifestación, es un acto por la paz y la solidaridad.

Los gijoneses que ayer paseaban por el Muro se encontraron con una concentración espectacular: 1.600 alumnos de entre 3 y 18 años haciendo una cadena humana por la solidaridad. Los chicos, del colegio del Corazón de María, desplegaron frente a la playa de San Lorenzo ocho grandes pancartas, tantas como los objetivos de desarrollo del milenio, aprobados en la Cumbre del Milenio de la Organización de Naciones Unidas en el año 2000.

No era una manifestación, sino más bien un acto con cierta parte lúdica (pasar un rato fuera del aula), según reconoció el coordinador de las jornadas, Simón Cortina Hevia (Delegado de fundación PROCLADE Asturias) Pero la concentración sirvió también para que los mayores reflexionasen sobre esos objetivos: lograr agua potable para todo el mundo, educación gratuita y universal en la etapa de Primaria, eliminar la deuda externa, igualdad de género, lucha contra el sida, la erradicación de la extrema pobreza, la mejora de la salud materna y, por último, la necesidad de una alianza internacional para el desarrollo sostenible con la preservación del medio ambiente.

¿Les suena esto a chino a los chicos? Parece que no. «Nosotros no podemos hacer mucho para evitar estos problemas, pero sí contribuir a preservar el medio ambiente y ayudar a los que necesitan», comentaron Lara, Alfonso, Vicky, Daniel, Alejandro y Gabriel, alumnos del grupo C de tercero de Secundaria. Todos estaban convencidos de que «la unión hace la fuerza». La pandilla de Lara y Alfonso era tan sólo un punto en el marco de la gran cadena humana, que arrancaba en La Escalerona y seguía hasta la escalera 14, casi hasta el puente del Piles. A lo largo de esa cadena, alumnos, profesores e, incluso, familias iban pasándose las pancartas, hasta llegar al final del trayecto. Comenzaba entonces una ola humana, tras la que se rompió la cadena solidaria.

Se trata de una iniciativa que se repite en los últimos años durante el segundo trimestre, en el marco de las Jornadas de la Solidaridad. Con ellas se pretende «trabajar valores del ideario del centro, como la paz, la justicia, la igualdad, el respeto o la justicia social», puntualizó el coordinador.

‘Operación bocata’

Las Jornadas de la Solidaridad 2006, que culminan hoy, están respaldadas con un trabajo en las aulas en las diferentes materias y con acciones significativas. Durante estos días, el horario lectivo ordinario sufre variaciones y se propician acciones conjuntas. El objetivo es simbolizar la participación, corresponsabilidad y cooperación de toda la comunidad educativa claretiana.


Para ello, se han programado exposiciones, juegos, conferencias y celebraciones, así como la ‘operación bocata’ y una merienda solidaria, con la que se recaudan fondos para los más desfavorecidos. Además, los alumnos rezan cada día una oración sobre la temática concreta que se aborde.

También La Nueva España del viernes 3 de marzo recogía la noticia.

Más de 1.600 alumnos del Corazón de María se unieron en la mañana de ayer a lo largo del muro de la playa de San Lorenzo para demostrar que la unidad puede conseguir que otro mundo sea posible.

Desde la escalera 14 hasta la Escalerona, los alumnos portaron pancartas que hacían referencia a los ocho objetivos de desarrollo del milenio. Erradicar la pobreza externa y el hambre, reducir la mortalidad infantil, combatir el VIH y lograr la Enseñanza Primaria universal son algunos de los propósitos expresados. El coordinador de las jornadas «Sin duda, sin deuda», Simón Cortina, explicó que «queremos hacerles ver a los niños los problemas que existen en los países del Tercer Mundo y cómo ellos pueden ayudar a su manera».
Esta cadena humana supuso el acto central de las jornadas de solidaridad anuales, dedicadas a acabar con la deuda externa y que finalizan hoy en el centro educativo, después de tres días, en los que los profesores han intentado transmitir a los niños valores como la paz, la justicia y la igualdad.