Ahora que ha llegado el verano y las vacaciones se han implantado al fin, podemos poner la mirada en uno de los aspectos más importantes sobre el tiempo de confinamiento que hemos vivido: el acceso a la educación de millones de niños y niñas en el mundo. 

El sector educativo también ha sido afectado por la pandemia global del COVID-19, el virus ha provocado que 1500 millones de niños, niñas y jóvenes salgan de las aulas en 192 países, con un mayor impacto en personas y comunidades vulnerables. 

La continuidad del aprendizaje está en riesgo a causa de retos globales que dificultan la educación a distancia, como la brecha digital o la imposibilidad de las familias de apoyar adecuadamente el proceso educativo de niños y niñas.

Desde Fundación PROCLADE creemos que el apadrinamiento educativo puede ser una ayuda fundamental para paliar el primer impacto de esta crisis en los niños y niñas que a medio y largo plazo más van a sufrir las consecuencias. El proyecto de Apadrinamiento de niños pretende favorecer su desarrollo en situaciones de necesidad (desnutrición, malas condiciones sanitarias, falta de recursos educativos, trabajo en condiciones de explotación…). El objetivo de esta ayuda es que la situación del niño/a favorezca su inserción en el sistema educativo en las mejores condiciones posibles para asegurar el desarrollo de la comunidad en la que vive.

Si quieres colaborar con el proyecto y así reducir el impacto de la crisis, rellena este formulario